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Tomado del facebook de alvaro portales

Prepotencia, Ignoracia y Soberbia (II)

Prejuicios, miedos e intolerancia predominan en la sociedad peruana

Publicado: 2015-03-12

El día martes se archivó el proyecto de ley para la Unión Civil. Soy una firme defensora de esta causa (y no, no soy gay), por lo que me generó gran decepción. Pero habiendo leído, escuchado y soportado durante meses las "opiniones" y "comentarios" de miles de internautas en redes sociales, web de diarios, sondeos, entrevistas, encuestas, etc., la verdad no debería sorprenderme.

Si algo me ha quedado clarísimo es que nuestra sociedad es mucho, pero mucho más conservadora, cucufata y miedosa de lo que ya suponía. No he podido encontrar a una sola persona que se oponga a la Unión Civil que no esté cargada de odio, prejuicios y/o temores infundados.

Todos y cada uno de sus "argumentos" son fácilmente rebatibles. La mayoría son argumentos que no resisten el análisis, que se basan en dogmas (y los dogmas no aceptan cambios ni cuestionamientos) o que se apoyan en ideas tradicionales y conservadoras que tampoco admiten revisión. Incluso aquellos que no hacen alusión directa a "Dios", "el pecado" o "la Biblia", indican como sus principales razones para oponerse "lo natural", "lo normal", "la familia" y el argumento que aparentemente no tiene pierde, "los niños".

Pero la verdad es que hay muchos estudios científicos serios y corpus teóricos provenientes de diversas ciencias naturales y sociales que destruyen todos estos argumentos sin dejar lugar a la duda. La medicina, la biología, la psicología, la sociología, la antropología (entre otras), aportan respuestas claras a todos los cuestionamientos y temores que se esgrimen contra la Unión Civil.

Y no obstante, esas respuestas no resultan satisfactorias para quienes están en contra. Por el contrario, las rechazan y descalifican sin argumentos reales en contra o piden "tolerancia y respeto por sus opiniones". Las opiniones divergentes sí deben respetarse (aunque no se compartan), pero ninguna de esas opiniones tendría por qué influir en una decisión que apela al derecho jurídico y al respeto a la libertad y los derechos fundamentales de un grupo de personas. Aquí no cabe la "democracia". Así la mayoría esté contra.

Si fuera así nunca se habrían aprobado reformas como el voto femenino, el voto de los analfabetos, los matrimonios interraciales, la abolición de la esclavitud. Incluso nuestra Independencia no se habría dado en 1821, pues la clase criolla y dominante estaba en contra de ella.

Para el caso de la Unión Civil, he oído también desopilantes argumentos de quienes esgrimen una extraña y retorcida teoría conspirativa, de que todos esos estudios hechos por miles de académicos de diversas partes del mundo y en diversas épocas están pagados por un supuestamente poderosísimo "Lobby Gay". ¿En serio? Las teorías de contacto extraterrestre de Sixto Paz tienen más sentido. Si tal "Lobby Gay" existiera, hace mucho que estas leyes estarían aprobadas en todo el mundo.

Y por cierto ¿Cuál sería la agenda de este ultra secreto y ultra poderoso grupo? ¿"Homosexualizar" al mundo? ¿Acabar con las familias? ¿Destruir la moral? ¿Traer la decadencia? ¿Trabajan acaso para Satán por el oscurantismo de la sociedad? Por favor, no seamos ridículos.

Este artículo del respetado Dr. Elmer Huerta del año pasado era muy claro, conciso y esclarecedor, pero si leen los "comentarios"... los ataques son terribles y sin sentido.

Lo que he podido identificar en común en todos estos comentarios de quienes se oponen es que son personas con nula tolerancia, son incapaces de debatir, de sostener una conversación alturada fuera de los insultos y bajezas, además del hecho que en casi todos los casos su nivel de redacción es pobrísimo, su ortografía pésima y su sintaxis debería devolverlos a la primaria.

Por tanto, nuevamente estamos ante un problema de educación. Y no me refiero necesariamente a la educación formal, a aquella que se da en la escuela. Hablo de una formación integral, que abarque no solo lo académico (en lo que también estamos muy mal) sino también el desarrollo personal e integral: que los individuos sean capaces de debatir, de argumentar, de criticar, de cuestionar. La tolerancia y el respeto también se inculcan y se enseñan.

Es probable que no se genere ningún cambio real respecto a la intolerancia de esas miles de personas mientras no se eduque a una nueva generación. Es tarea nuestra, de todos aquellos profesionales que de alguna forma nos movemos en los ámbitos de la educación, la cultura, las ciencias sociales, las artes, ir formando nuevas generaciones de personas más tolerantes y más inclusivas.

Pero sobre todo, individuos con mayor empatía y mayor sensibilidad hacia el otro; así sea de diferente raza, condición social, género o especie. Tal vez así en un futuro tengamos menos maltratadores de animales, menos racistas, menos xenófobos, menos homofóbicos y tal vez también tengamos otro tipo de autoridades: menos Julios Rosas, menos Tubinos, menos Castañedas.

EDUCACIÓN CRITICA Y LAICA AHORA, ES URGENTE.

"imagina cuan ESTÚPIDO vas a verte en 40 años"




Escrito por

Giannina Bardales

Eterna enamorada de la cultura, el arte, la educación. Creo que la duda, la crítica y sobre todo la tolerancia nos liberan, nos hace humanos


Publicado en

El Nombre de la Rosa

Cultura, pedagogía, arte y sociedad. Arqueóloga disidente. En la eterna búsqueda de La Comedia de Aristóteles.